Sostiene a pesar de todos los embates que ha mantenido la salud fiscal de su administración y bajó a la mitad el déficit heredado. Resalta este año un superávit de 1.3 millones.
El alcalde de Villalba y presidente de la Asociación de Alcaldes, Luis Javier Hernández mantiene un superávit operacional tras el último informe de la firma externa de auditoría y el CPA Rey Meléndez quien funge como asesor financiero de decenas de municipios.
“Este año pasado cerramos nuevamente con un superávit operacional, en esta ocasión de $1.2 millones de dólares. Y en los pasados años hemos cerrado todos los presupuestos operacionales en superávit”, explicó el alcalde de Villalba.
Según el informe presentado por la firma externa de contabilidad, el municipio de Villalba logró reducir dramáticamente el déficit acumulado a casi el 50%, es decir de una deuda heredada de $13 millones, actualmente se ha logrado reducir a $7.5 millones. Esto a pesar que el gobierno le quitó a los municipios cerca de $20 millones en fondos recurrentes durante los pasados años.
“Cada dólar que se desembolsa en el Municipio va encaminado a proveer un servicio, a suplir una necesidad y cumplir con una responsabilidad que nos confirió el Pueblo como funcionario electo, es por esto que en nuestro municipio nos hemos mantenido haciendo obras, ayudando a nuestra gente y sosteniendo el 100% de la plantilla de empleados” dijo Hernández Ortiz.
El primer mandatario villalbeño explicó que a partir del año fiscal 2017-2018 y en medio del desastre infligido por el gobierno central y la Junta de Supervision Fiscal que enfrentan los municipios, comenzó a estabilizar las finanzas municipales. En dicho año finalizó con un déficit de sólo $393 mil dólares en un presupuesto de $11.4 millones.
“Hay que destacar que en el siguiente año fiscal 2018-2019 logramos finalizar con un superávit de $389 mil dólares, logrando armonizar los gastos con los ingresos recaudados, del mismo modo tengo que decir que en el año fiscal 2019-2020 enfrentamos un cierre (lockdown) mundial sin precedentes en la historia humana y tuve que seguir pagando los salarios de los empleados municipales aunque no estuvieran laborando y los recaudos se detuvieran”, planteó el alcalde de Villalba. Los limitados recursos que se recibían en el municipio hubo que dirigirlo para atender la situación de la Pandemia. Ese año finalizó con un déficit de $1 millón. Sin embargo, en el año fiscal siguiente 2020-2021 el alcalde logró nuevamente estabilizar las finanzas municipales a pesar que continuaban los efectos adversos de la Pandemia.
“En este año finalizamos con un superávit de $1,379,000. El Single Audit de este periodo será emitido durante esta misma semana. Al igual que en el año fiscal 2021-2022 el superávit estimado es de $500 mil, aproximadamente. Nuestros auditores externos se encuentran en el proceso de la correspondiente auditoría y hemos tomado las medidas necesarias para estabilizar nuestras operaciones, en medio de múltiples crisis”, aseguró el presidente de la Asociación de Alcaldes.
Se destaca que el municipio de Villalba ha estado económicamente equilibrado en sus operaciones y manteniendo un sin número de proyectos de infraestructura, optimizando sus recursos e implementando medidas que fortalecen sus finanzas.
“Lo que me ha dado éxito en los desafíos que he enfrentado como administrador municipal han sido: mi confianza en Dios, mantenerme íntegro y no permitir que las circunstancias me desvíen de mi propósito de servir, y mantenerme sensible a las necesidades de cada ciudadano para actuar con prontitud en la búsqueda de soluciónes”, concluyó Luis Javier Hernández.
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